jueves, 17 de abril de 2014

Documentación Científica IV Gráficas.




Entre los elementos que componen un artículo científico, se encuentra uno que permite visualizar las relaciones entre datos o simplemente transmitir información cuantitativa. Este elemento sencillo y en ocasiones algo olvidado, permite resumir la totalidad del artículo científico, además de transmitir la información de una manera más eficiente. 


Me estoy refiriendo a las gráficas, por las cuales siento especial debilidad, bien por ser Ingeniero Agrónomo (recordemos la fuerte carga de expresión gráfica y cartográfica junto con el elevado número de horas de Autocad y SIG) o bien por trabajar en el mundo de la investigación con una herramienta que desde mi punto de vista para salidas gráficas no tiene rival, R.


Existen multitud de manuales, libros y artículos que analizan la estructura de las gráficas (sirva de ejemplo este libro de Joaquín Sevilla), de los cuales referenciaré y enlazaré alguno. El objetivo de la entrada es señalar algunas de las características principales, señaladas por otros autores y en mi opinión, que son necesarias a la hora de realizar una gráfica para un documento científico. 


Las gráficas deben permitir interpretarlas y poder extraer conclusiones de manera sencilla sin necesidad de leer el apartado de resultados y/o conclusiones. Lo que quiere decir que deben gozar de cierta autonomía para poder ser interpretadas de manera independiente al texto. Todas las partes de las gráficas deben ser identificadas y explicadas, así como estar citadas en el texto.


 Para poder interpretar bien las gráficas, sus elementos han de estar claramente identificados por una leyenda, la cual ha de aportar la mayor cantidad de información posible en el menor espacio posible. Tanto los títulos como las leyendas juegan un papel fundamental a la hora de aportar claridad a la interpretación de las gráficas. En muchas ocasiones el título no será necesario al incluir una leyenda que explique perfectamente el contenido y finalidad de la gráfica.
Ejemplo de una gráfica correcta. Fuente: Biegel & Kamat


La escala, tanto del gráfico, elementos que lo componen, tipo y tamaño de las letras, será la acorde para una interpretación agradable a la vista, es decir, para la interpretación de las gráficas no debe ser necesario forzar la vista ni emplear una lupa o similares. 


El empleo de colores puede mejorar la interpretación del gráfico, pero puede diferir de las necesidades de la revista, así como afectar negativamente a la reproductibilidad del gráfico.

Los buenos gráficos son aquellos que transmiten la idea de manera clara (sin falta de ambigüedad y confusión), precisa (resultados veraces y sin distorsión) y eficiente (ruido gráfico “chartjunk” mínimo) (Tufte, 1983).


Los gráficos de mala calidad, o cuanto menos mejorable, son aquellos que no tienen una uniformidad en cuanto a elementos; textos en diferentes direcciones, repeticiones innecesarias, falta de identificación de elementos o ausencia de ejes, no relación entre signos empleados y los utilizados en las leyendas.

Ejemplo de una gráfica errónea. Fuente: Biegel & Kamat


Otra de las características que han de tener las gráficas es el uso del “buen gusto”; el empleo de colores no complementarios con un contraste de dudosa amigabilidad (rojo y verde), tipologías de letras no adecuadas (muchos autores recomiendan “serif”), así como no mantener la uniformidad entre los diferentes elementos que componen la gráfica, no ayudarán a obtener una gráfica de buena calidad que transmita la calidad de la investigación realizada.


Algunas consideraciones a la hora de realizar gráficos para publicaciones científicas tanto para autores como para los editores  de las revistas (Cleveland, 1984):


  • Consideraciones para los Editores:
  • Pedir a los revisores que revisen las gráficas y sugieran modificaciones si es necesario.
  • Prestar especial atención a las reducciones y reproducciones que los gráficos pueden soportar.
  • Consideraciones para los Autores:
  • Los gráficos deben ser lo suficientemente claros para soportar reducciones.
  • Los gráficos deben estar claramente descritos. Leyendas detalladas a menudo pueden ser de gran ayuda para el lector.
  • Cuando sea posible poner conclusiones importantes de manera gráfica, ya que mucha gente no lee el artículo de inicio a fin, y así se conseguirá llamar la atención.
  • Asegurarse que los diferentes elementos del gráfico pueden ser distinguidos de manera visual fácilmente.
  • Evitar la saturación de la zona gráfica. Exceso de texto en la zona de dibujo puede interferir en la percepción del lector.
  • Revisar los gráficos.

A la hora de realizar una gráfica para nuestro artículo científico debemos tener presentes todas las consideraciones anteriores, sobre todo la máxima de; clara, precisa y eficiente señalada por Tufte (1983), consiguiendo así un conjunto de calidad (texto más gráficas) que transmita nuestra capacidad profesional, no olvidemos que con el artículo científico estamos trasladando al exterior nuestra “imagen” profesional.


Algunas consideraciones sobre gráficas y artículos científicos las podemos encontrar aquí




Una gran guía con ejemplos de lo que no se debe de hacer:




Referencias.



Cleveland, W. S. (1984). Graphs in scientific publications. The American Statistician, 38(4), 261-269.

Tufte, E. R., & Graves-Morris, P. R. (1983). The visual display of quantitative information (Vol. 2). Cheshire, CT: Graphics press.

1 comentario:

  1. Hola,
    Estoy de acuerdo con tu valoración de las gráficas.
    Aparte, una vez me dijeron es que era mejor evitar marcar los puntos con "puntos gordos" o "cuadrados" como es el caso de ambas gráficas.

    En este caso, como los puntos están unidos con rectas, no creo que haya confusión pero los puntos muy gordos o cuadrados, resaltan muy bien, pero te queda la duda de cuál es el valor exacto (se pierde precisión, que en algunos momentos, se vuelve importante). Es por eso, que me aconsejaron una "x" ya que el punto exacto es donde se unen ambas rectas.
    Laura

    ResponderEliminar